SOMBRAS Y MUÑECOS

Hubo elecciones y todos se adjudican algún éxito. Si se demanda autocrítica a aquellos que descaradamente se atribuían la representatividad que los números, antes y ahora, no le reconocen sólo se obtienen respuestas retóricas.
Ya son muchas las veces que cualquiera sea la decisión de los votantes el camino de las urnas no alcanza para otra cosa que hacernos sentir verguenza ajena.
Pero entonces hay que abandonar el camino de la legalidad y hundirse otra vez en la desesperacion suicida?
No es esa la repuesta que se impone!
Existen alternativas!
No nos merecemos ni tenemos porqué optar por los mediocres que se auto-proponen como dirigentes.
Aún estando en el peor momento de nuestra existencia como nación, no tenemos porque aceptar para las jerarquías más elevadas a candidatos que no llenarían condiciones para los puestos mas modestos.
Si Ud. sospecha que nuestros ministros, secretarios, diputados y senadores no son los que el pais necesita y ud. se merece, hagase fuerte en la certidumbre de que es asi tal cual ud. sospecha.
Pero y entonces que hacer? Acumular rencor no viabiliza el camino superador.
Nuestros mandatarios no pueden tener otro destino que el escarnio de la ciudadanía pero sólo la paciencia puede facilitar el camino hacia la superación sin arriesgar la institucionalidad.
Saldremos de las sombras y apartaremos a los muñecos, es menester paciencia y tenacidad.